Dios salve al fútbol

Hoy es un día grande en el Mundial de Sudáfrica. Pocos partidos tienen más morbo y tradición que un Alemania-Inglaterra. Podía ser una final, pero es un partido de octavos. Solo el España-Portugal del martes está a su altura, por lo que hasta el momento se puede considerar que es EL PARTIDO del Mundial. Y si eso fuera poco Argentina y México se medirán a las 20:30, por si no habíamos tenido suficiente.

Inglaterra no hizo una buena fase de clasificación, por contra, Alemania sí, pero nadie se fía de los británicos. Capello es perro viejo y se las sabe todas, además, es muy difícil que un equipo dirigido por el italiano pierda. Pero esto es un mundial y todo puede pasar. A priori los de Low tomarán más riesgos, mientras que Inglaterra esperará cerrada atrás y tratando de hacer daño a la contra, ya que han demostrado sobradamente que lo de llevar el peso de los partidos no va con ellos.

Probablemente sea un partido de detalles, en el que los cracks pueden decidir en cualquier momento. Es el día de Ozil y Rooney, el Mundial se quedará huérfano del talento de uno de los dos, pero hay que reconocer que el delantero del United está completando un campeonato decepcionante, pero en encuentros como el de hoy es cuando más se le espera.

Sería bueno que Alemania pasase a cuartos. Su fútbol ha sufrido un cambio considerable, apuestan por el talento y van al ataque. Atrás quedó el mítico rodillo alemán, pero a todo el mundo le ha sorprendido para bien la nueva Mannschaft y sería un bonito premio el pase a cuartos.

Y si no tuviéramos suficiente con ese partido Messi juega esta noche. La albiceleste se mide a México en su camino a la final, reeditando el partido jugado en Gelsenkirchen hace cuatro años que se decidió con un golazo de Maxi Rodríguez en la prórroga. Me temo que hoy no lleguen al tiempo suplementario porque no creo que los aztecas sean capaces de controlar el talento argentino. Con el potencial que tienen arriba es impensable que alguno no te la líe.

Habrá que ver qué hace Aguirre para evitar las embestidas de Messi, no creo que lo consiga, porque cuando el delantero del Barça consigue asociarse con sus compañeros es imparable. Además, si para a Messi por ahí estarán Higuaín y Tévez dispuestos a montarle un buen quilombo a los mexicanos.

Seguro que el ex entrenador del Atlético y Osasuna aprovechará la velocidad de sus puntas para intentar hacer daño con balones a la espalda de los lentos centrales argentinos. Eso sí, supongo que Aguirre le cederá la posesión a Argentina, ya que si México tiene más posesión de balón Messi y compañía te la liarán con espacios y a la contra. En cualquier caso se antojan dos partidazos.

Esto es el Mundial y toca disfrutar del fútbol.