La Real se despide de San Mamés a lo grande (1-3)


Una victoria histórica

Una victoria histórica

Cuando a media tarde el twittero Txitxo Díaz (@txitxoirun) adelantó que Montanier había decidido dejar a Vela en el banquillo pensé que el francés se había vuelto loco, y no fui el único. «Montanier se inmola en La Catedral» podía haber sido el título de este texto, pero una vez visto el partido el titular correcto debió ser: «Montanier gana a la ruleta rusa en San Mamés». El técnico de Vernon fue uno de los protagonistas del derbi, de eso no cabe la menor duda, pero vamos por partes.

Vela fue suplente, por lo que la Real Sociedad empezó el partido dando ventaja al Athletic. ¿Qué pasaría si Mourinho dejase a Cristiano en el banquillo o Roura a Messi en el partido del martes? Mejor no pensarlo, pero es lo que hizo Montanier. Reservar a su máximo goleador y jugador más desequilibrante por decisión técnica. La jugada le salió redonda, pero el tiro también le pudo salir por la culata, porque la Real sin Vela no fue superior al equipo bilbaíno. 

El guión de la primera parte fue el esperado por todos, Montanier incluido. Dominio inicial del Athletic más por casta que por fútbol. Los de Bielsa llegaban al Derbi después de dos derrotas consecutivas y con muchísimas dudas. El técnico rosarino volvió a apostar por Raúl Fernández en la portería, que no se estrenaba en un partido de estas características, pero su inexperiencia resultó decisiva en la segunda parte.

En el primer acto se jugó el partido que Bielsa había diseñado, un correcalles constante sin ningún tipo de control, exactamente lo que más le podía perjudicar a la Real, que necesitaba que Illarramendi se hiciera con el mando del partido, pero con la velocidad a la que jugaban ambos conjuntos era misión imposible tratar de ralentizarlo.

El Athletic llegaba más y creaba más ocasiones, pero Bravo estuvo seguro y desvió todas las que fueron a puerta. Nada pudo hacer ante el obús de Ibai Gómez, uno de los goles de la Liga sin discusión. El rojiblanco emperchó un centro desde la banda izquierda según le llegó y Bravo sólo pudo aplaudir. Un golazo en toda regla.

El partido se ponía complicado para la Real, por debajo en el marcador y con un ambiente de lo más hostil en contra. Pero este equipo ha progresado mucho en estos meses. El año pasado en esa situación el segundo gol no hubiera tardado en llegar debido a la debilidad anímica del equipo, pero en San Mamés quedó claro que las cosas han cambiado, el equipo ha madurado. La demostración de ello fue que en vez de perder la cara al partido se fueron a por el Athletic sin nada que temer.

Griezmann volvió en el momento más oportuno

Griezmann volvió en el momento más oportuno

Griezmann sólo tardo tres minutos en empatar y silenció La Catedral. El Athletic empezaba a perder el último Derbi que se disputaba en su estadio. Chory Castro le puso un excelente balón al francés, un centro que hubiera firmado el mismísimo Javi De Pedro, que el ‘7’ cabeceó a la red.

A pesar de que el Athletic había hecho más méritos para llegar al descanso con ventaja, el marcador señalaba 1-1 al término de los primeros 45 minutos. Para unos el resultado era injusto, mientras que para los otros era excesivo premio para el juego que habían realizado.

Apoteosis realista

La segunda mitad fue totalmente opuesta a la primera. La Real se hizo dueña del balón y aunque la posesión no se tradujo en muchas ocasiones, controló el partido al ritmo que marcaba un Illarramendi que crece a pasos agigantados.

El gol de Griezmann fue un auténtico mazazo para el equipo y la parroquia rojiblanca, que han olvidado los éxitos de la pasada campaña y este año lucharán por evitar el descenso. El Athletic no estuvo en la segunda parte de San Mamés, lo demostró De Marcos haciendo una falta absurda que derivó en el segundo gol. Es un equipo desquiciado por tanta polémica extradeportiva y los jugadores acaban pagando todo eso en el terreno de juego. Raúl Fernandez pagó su inexperiencia regalándole un gol a un Agirretxe que estuvo ahí con la caña preparada. El balón botó justo delante del portero y a trancas y barrancas el delantero de Usurbil lo mandó a la red.

A partir de ese momento el Athletic desapareció. Once jugadores deambulaban por el césped, más perdidos que un esquimal en el desierto. A Montanier le salió la jugada redonda, con el marcador a favor retiró a Agirretxe y dio entrada a Vela, más dinamita para acabar de hundir la nave rojiblanca.

Para certificar el éxito del experimento del técnico francés, Vela remató a los leones. Zurutuza, que acababa de entrar por Chory, le puso un balón genial al mexicano, que acomodó el cuerpo a la perfección y colocó el balón sutilmente lejos del alcance de Raúl. La mejor formal posible de finalizar una transición perfecta. Vela celebró su undécimo gol junto a la afición, exultante después de ver a su equipo ganar un partido que siempre es especial. La noche a la intemperie para conseguir las entradas estaba absolutamente justificada. Una victoria como la de la Real en San Mamés no se paga con dinero, ninguno de los allí presentes podrá olvidar esa fría noche en el vetusto estadio rojiblanco.

Así marca los goles la Real


Carlos Vela, el bombardero de Cancún

Carlos Vela, el bombardero de Cancún

Desde hace unas semanas se viene comentando que la Real no sabe atacar a defensas cerradas y creo que es cierto, por lo que he querido analizar cómo marca el equipo de Montanier sus goles. Hay varios datos que son de lo más curioso.

Goleadores: Doce son los jugadores de la Real que han visto puerta esta campaña, siendo Vela el máximo anotador con diez tantos. El azteca marca el 26,3% de los goles del equipo. Le siguen Agirretxe y Chory Castro con cinco goles cada uno. Por detrás están Prieto y Griezmann con cuatro por cabeza.

Pie izquierdo: De los 38 goles marcados por los txuriurdines, 20 han sido con el pie izquierdo (52,6%), 14 con el derecho (36,8%) y 4 de cabeza (10,5%). Teniendo en cuenta que Vela, Griezmann y Chory Castro son zurdos no es de extrañar que la izquierda sea la pierna con la que más goles se han conseguido.

La misión imposible: Ningún jugador de la Real Sociedad ha conseguido marcar gol de falta esta temporada. De hecho, si la memoria no me falla, no se ha marcado de libre directo desde que se retornó a la máxima categoría, y esta ya es la tercera campaña. Es el gran lunar de un equipo que tiene un gran bagaje goleador, pero que no saca rendimiento de las numerosas ocasiones que dispone a balón parado. Para colmo, este año tampoco se ha marcado ningún gol rematando una falta.

Córners: Desde que Montanier aterrizase en el banquillo de Anoeta muchos córners se botan en corto, el denominado ‘gilicórner’. Es imposible saber cuantos se han sacado así y cuantos directos, pero de los 164 corners de los que dispuso la Real hasta el partido del Levante sólo 6 acabaron en gol, el 3,6%. Eso indica o que no ha tenido suerte en el remate o que no se trabaja la estrategia lo suficiente, ya que el dato es preocupante.

Los jugadores de la Real celebran un golDe los 6 goles anotados tras botar un saque de esquina 3 fueron de cabeza (Iñigo Martínez, Mikel González y Elustondo), y Griezmann anotó en Zorrilla con el pie después de un rechace. Chory Castro marcó al Barça en un balón que le cayó tras un córner botado en corto, al igual que Agirretxe en Zaragoza.

Remates: Mucho se ha hablado en las últimas semanas sobre la dificultad de atacar una defensa cerrada y cómo superarla. Ningún entrenador tiene la fórmula mágica ni hay una manera infalible para hacerlo. Está claro que a la Real le cuesta un mundo derribarlas y prueba de ello es que sólo se ha marcado un gol en remate de cabeza a centro lateral. Fue Carlos Martínez al Getafe a centro de De la Bella y es el único gol que se ha marcado con la testa sin contar los córners. Otras temporadas Agirretxe anotaba varios de esta manera, pero está claro que esta temporada no ha tenido suerte.

Los de Montanier no están teniendo suerte en los remates (golpear el balón al primer toque), ya que son pocos los goles que se han logrado de esta forma. El más importante y el que todos tenemos en la memoria fue el de Agirretxe ante el Barça que le dio a la Real los tres puntos y mantuvo el récord de imbatibilidad en posesión del club txuriurdin.

Las transiciones: Son la joya de la corona y lo que mejor hace el equipo de Montanier. Apenas se han marcado goles en remates y no se sabe atacar a una defensa bien cerrada, pero la Real es mortal con espacio en el centro del campo y llegando desde atrás. 16 de los 38 goles se han marcado en claras transiciones (42,1%). Los mejores tantos han llegado de esta manera, apareciendo con velocidad y el balón controlado. La Real no se encuentra cómoda mareando la perdiz al borde del área, prefiere cruzar con velocidad el centro del campo y llegar a la portería, lo antes posible, aunque no importan los pases que haya que ejecutar. Eso sí, la clave es la velocidad a la que se ejecutan las acciones.

Para muestra un botón: el gol de Vela al Sevilla. En mi opinión el mejor que han marcado este año. Esa combinación en el centro del campo pocos equipos pueden realizarla.

Muchas de estas acciones han terminado en gol o en ocasiones muy claras, aunque los rivales recurren a las faltas habitualmente cuando un realista enfila la portería, de ahí que se generen tantas amarillas. Las ocho expulsiones consecutivas no son casualidad, son a causa de la calidad y velocidad de los jugadores realistas.

Penaltis: Los txuriurdines tienen un 100% de efectividad esta temporada (13,1% del total de los goles). Han lanzado cinco penaltis y los han marcado todos. Vela ha anotado cuatro y Prieto uno, en el Bernabéu, el día de su único hat-trick en Primera división.

Larga distancia: La Real tiene jugadores que golpean muy bien el balón, por lo que es curioso que sólo haya marcado dos goles (5,2%) desde fuera del área. Zurutuza ante el Levante y Griezmann en Valladolid son los únicos que pueden presumir en el vestuario de haberlo conseguido. A buen seguro que Chory Castro o Vela consiguen hacerlo antes de que finalice la campaña.

Individualidades: Messi y Cristiano son los reyes de las individualidades, los Juan Palomo de la Liga y aunque en la Real haya algún que otro ‘chupón’ pocas jugadas individuales acaban en gol. Lo consiguieron Zurutuza en su único gol y Vela ante el Deportivo, pero es injusto no destacar que grandes individualidades acaban en gol ya sea tras un pase o un rechazo, como bien demostró Agirretxe ante el Celta después de un grandioso slalom obra de Antoine Griezmann.

Defensas: Es curioso que los cuatro defensas que más minutos han disputado: Carlos Martínez, Mikel González, Iñigo Martínez y De la Bella hayan marcado, como mínimo, un gol cada uno. Ante la ausencia de un killer y la baja cifra goleadora de los dos nueves, Agirretxe e Ifrán, son los jugadores de segunda línea quienes llevan el peso goleador del equipo.

Llama la atención que de los jugadores que se encargan de organizar el juego ninguno haya conseguido marcar gol, ya que el día que Zurutuza anotó ante el Levante ejercía de mediapunta, y en Vigo, cuando Elustondo marcó en un córner, estaba jugando de central. Pardo, Illarramendi y Markel son tres de los que todavía no han marcado y eso que juegan la mayoría de los encuentros.

La Real rompe el gafe


Los jugadores de la Real celebran el segundo gol

Los jugadores de la Real celebran el segundo gol

Por fin se consiguió. La Real fue capaz de ganar a uno de los equipos de la parte baja de la tabla, después de muchos intentos y de contar con una estadística demoledora. Esos datos han mejorado un poquito, y en cuanto han mejorado la Real se ha acercado a Europa. El equipo se deshizo sin problemas de un flojo Mallorca, pero no es oro todo lo que reluce. El resultado (3-0) puede ser un tanto engañoso, puesto que la Real no hizo méritos para conseguir semejante renta de goles. Las tres ocasiones claras que tuvo las materializó, además de contar con la ayuda del árbitro.

Teixeira Vitienes expulsó a Javi Márquez

Teixeira Vitienes expulsó a Javi Márquez

José Antonio Teixiera Vitienes fue decisivo en el resultado final. Así fue y así hay que decirlo. Expulsó por doble amarilla a Javi Márquez en el minuto 30 de la primera parte, inventándose la segunda amonestación. Para colmo, quince minutos después perdonó la expulsión a José Ángel en una acción similar, pero mucho más clara que la anterior. Gracias a la ayuda arbitral la Real se convirtió en el primer equipo que jugó por sexta vez consecutiva contra un rival en inferioridad numérica, y esta vez lo aprovechó.

No fueron pocas las críticas al equipo y a Montanier por no haber ganado a equipos inferiores que se quedaron con un jugador menos. Cuando Márquez se fue a la caseta a mas de uno se le volvieron a aparecer los fantasmas. La Real volvió a incidir en los mismos errores de anteriores partidos, centros precipitados al área, sin masticar la jugada y con un rematador pequeñito en el área. En los últimos 15 minutos de la primera parte, Calatayud no tuvo trabajo, puesto que la Real no le puso en apuros.

La segunda parte comenzó igual, Montanier no hizo cambios en el descanso y el equipo seguía empeñado en el plan que no había fructificado. Estaba claro que colgando balones difícilmente llegaría el gol y así fue, porque la Real abrió el marcador con una transición marca de la casa, como otras tantas veces. La Real no sabe rematar, sabe llegar. Griezmann, que ayer no estuvo en Anoeta pero calidad tiene de sobra, se inventó un taconazo a Vela que destrozó la zaga bermellona, el azteca disparó y el rechazo de Aouate lo mandó a la red un Chory Castro que no celebró el gol por su pasado mallorquinista.

Esa jugada demostró muchas cosas. La primera que Vela es el jugador más desequilibrante y decisivo de la Real Sociedad, pero que cuando hace daño realmente es apareciendo desde atrás. Poco después demostró su instinto en el segundo gol, pero la mejor versión de Vela es la que aparece desde segunda línea.

Vela se va del debutante Hutton

Vela se va del debutante Hutton

El equipo de Montanier juega bien a fútbol, muy bien por momentos, pero necesita que el rival también se preste. Si el otro equipo se encierra atrás los realistas se atascan al carecer de un rematador de primer nivel. Por el contrario, si salen a por el partido y dejan espacios atrás la Real les mata, porque calidad para ello tiene de sobra. El Rayo puede dar fe de ello.

Pardo no estuvo bien ayer, por momentos abusó del juego en largo y se equivocó en alguna decisión, pero el chaval tiene tanta calidad que cuando se acerca al área es capaz de inventarse un pase como el del segundo gol. Él vio el hueco que sólo ven los elegidos, muy pocos. Le sirvió en bandeja un balón a Vela, el mexicano aceptó el regalo y mandó el balón a la red sin que Calatayud nada pudiera hacer.

A partir de ahí el partido fue coser y cantar para los realistas, que siguieron llegando al área rival y pudieron conseguir una goleada de escándalo. Ifrán consiguió su segundo gol de la temporada, pero lo que la afición espera de los nueves es que abran el marcador, no que lo cierren.

Tal y como estaba el partido pensé que lo mejor sería meter a Agirretxe en el descanso. Montanier no lo consideró oportuno y el resultado final le dio la razón. Realizó bien los cambios y gestionó bien el equipo en uno de los partidos más plácidos que ha tenido desde que es entrenador de la Real. A su favor debo decir que puso a José Ángel porque De la Bella estaba sancionado, pero el catalán hoy por hoy está mucho mejor que el asturiano, que realizó un partido muy pobre y tuvo que ser sustituido mediada las segunda mitad por problemas físicos.

Aquí tenéis el resumen del partido de la Real: