Sólo queda un partido. EL PARTIDO y éste si es el de nuestra vida. Nunca nos hemos visto en una situación así y nadie sabe si volveremos a vivirlo, por lo que debemos disfrutar del momento.
Pero antes de pensar en el domingo recreémonos en el encuentro de ayer. El rodillo alemán llegó con la vitola de favorito a Durban, era lógico tras sus últimas exhibiciones, pero España le quitó la etiqueta en cuanto comenzó el encuentro.
La Roja jugó su mejor partido desde la Euro. No se puede decir si jugó mejor o peor que entonces, pero lo de ayer fue maravilloso. Dieron una sensación de superioridad aplastante en todo momento, y aunque las ocasiones tardaron en llegar todo el mundo sabía que antes o después la pelotita acabaría entrando.
Seria injusto destacar a un solo jugador porque todos estuvieron colosales. El trabajo de todo el equipo en la recuperación del balón fue prodigioso, funcionaron como un acordeón que impidió que Alemania desplegase el fútbol al que nos tenía acostumbrados. Parecía un partido de niños contra hombres, de un ejercito sabedor de lo que debía hacer en todo momento, magistralmente dirigido por un Del Bosque que dio en la tecla al introducir a Don Pedro de inicio (Gracias Pep, por descubrirlo y darle la oportunidad).
La famosa España del tiki taka volvió ayer, nunca se había ido, pero hizo su aparición estelar en el momento indicado, dando un golpe en la mesa y diciendo al mundo que el equipo que quiera el título deberá superar primero a La Roja, esa selección que esta consiguiendo unir a todo un país con tantas diferencias entorno a una idea común. Es impresionante cómo la gente estos días varía sus hábitos porque juega España, pero no solo los futboleros como yo, sino gente a la que no le gusta el fútbol, o no lo entiende, pero que está orgullosa de que su país pueda proclamarse Campeón del Mundo de fútbol.
Señoras, señores, esto hay que vivirlo y disfrutarlo. Como bien dijo el célebre inventor del término tiki-taka, Andrés Montes (d.e.p), la vida puede ser maravillosa. Ojalá lo siga siendo el lunes.
Perdón por no poder editarlo como se merece, pero lo he escrito en el móvil y no tiene tantas opciones como en el ordenador.